En este artículo veremos juntos cómo funciona la famosa técnica de los Loci, empezando por las mismas palabras con las cuales Cicerón la describe en su libro “De Oratore”
Propia del orador es la memoria de las cosas, y esta se puede notar a través de algunas máscaras bien puestas, de modo tal que se pueda aferrar los pensamientos por medio de las imágenes y el orden por medio de lugares (loci)”
Así escribía Cicerón en sus notas hablando de la más famosa de las técnicas de memoria, la técnica de los Loci.
Cuando me hablaron de esta técnica por primera vez, yo tenía 14 años, y me pareció algo incómodo e ineficaz; así que la deseché por inútil. Claro, ¡yo era muy presuntuoso al pensar que Cicerón, el orador más grande de la historia, utilizaría para recordar sus discursos algo incómodo e inútil!
Y de hecho, unos años más tarde, afortunadamente comprendí que no fue Cicerón quien se equivocó, sino yo por no haber entendido cómo funciona la técnica.
Como funciona la técnica de los Loci
La técnica cuenta con dos puntos principales, y creo que Cicerón los describe muy bien:
1º “Asociar los pensamientos a través de imágenes”
2º “Asociar el orden por medio de los lugares”
El primer punto se refiere a la capacidad de transformar en imágenes aquello que queremos recordar
Cicerón, siendo un orador, habla de “pensamientos” refiriéndose de esta manera a los contenidos conceptuales en sus discursos.
Sin embargo, cualquier dato puede ser transformado, con las técnicas adecuadas, en imágenes: también números, fórmulas, nombres, y así sucesivamente.
De esta manera se aprovecha la gran capacidad del hemisferio cerebral derecho para recordar imágenes mejor que cualquier otra cosa (para profundizar ve al post “recordar a través de imágenes”).
En cambio, el segundo punto habla propiamente de los “loci” o lugares, de los cuales toma el nombre la técnica:
Prácticamente, Cicerón creaba rutas dentro de espacios que conocía (su casa, el camino para ir al Senado, y así sucesivamente) dentro de los cuales identificaba, una tras otra, las “estaciones” a las cuales unía las imágenes del punto uno.
De esta manera, era capaz de pasar en manera ordenada de un concepto al siguiente, mientras que “caminaba” en su cabeza por el camino que ya había creado.
Además, conectaba la información que tenía en su memoria de corto plazo (el discurso) con las que tenía en su memoria de largo plazo (los Loci), haciendolas más estables.
Cómo Cicerón utilizaba la técnica de los loci
Pretendamos que eres Cicerón, y tienes que dar un discurso en el cual debes mencionar alrededor de cuarenta puntos principales, y que los tres primeros sean: la importancia de la educación de los hijos; la mala calidad de la educación que se da en la escuela; la necesidad de fortalecer al sistema escolar.
En primer lugar debes convertir estos tres conceptos en imágenes. Podrías utilizar:
A Una imagen de tu hijo que está estudiando (la importancia de la educación de los hijos)
B Una imagen de una escuela que se cae a pedazos, con el techo roto y las paredes agrietadas (mala calidad de la educación)
C Una imagen de un profesor que levanta pesas (necesidad de fortalecer el sistema escolar)
Construidas todas las imágenes (recuerda que tu discurso tiene 40 puntos principales, no sólo los tres que hemos visto como ejemplo), comienza a asociarlas a los loci.
Digamos que, como eres Cicerón, has elegido el camino que va de tu casa hacia el Senado.
A • El primer paso
Podría ser la puerta por la que sales de tu casa. Aquí encuentras, con un libro en la mano, a tu hijo estudiando como loco. Aquí esta la asociación de la primer imagen al primer locus, la puerta.
B • A continuación,
cruzas el jardín frente a la casa y notas que en medio del jardín, en lugar de la bonita fuente de Tritones que había antes, hay una escuela en ruinas. Esta es la segunda imagen vinculada al segundo locus, el jardín de tu casa.
C • Por último
subes a tu carruaje tirada por caballos, o por lo menos lo intentas. Tu lugar está ocupado por el profesor X, concentrado en levantar pesas. Y aquí está la tercer imagen relacionada con el tercer lugar, el carruaje.
Con este sencillo ejemplo, creo que ya te sea posible captar la esencia de la técnica: puesto que es difícil recordar las cosas en orden, primero elijo un camino del cual ya conozco el orden perfectamente, y selecciono al interno del camino una serie de estaciones principales.
A continuación, transformo las cosas abstractas que quiero recordar en imágenes concretas que me las recuerden.
Finalmente, ato las imágenes a las estaciones del recorrido, una tras otra.
Cuando tengo que repetir el discurso, hago lo inverso: voy a la primer estación de la ruta; veo la imagen asociada, convierto la imagen en el concepto / idea / dato correspondiente. Después paso a la segunda estación y hago lo mismo, y así sucesivamente hasta el final.
Ahora, esto puede parecerte inútil si las cosas que debes recordar son 3.
Pero cuando se convierten en 30, o 300, o 3000, la técnica de los Loci demuestra toda su potencia. Si quieres un ejemplo un poco más complejo, puedes leer el post sobre “Cómo memorizar una baraja de 52 cartas”
¡Y no hagas como yo cuando tenía 14 años!
Nunca dudes de alguien como Cicerón.
Una ultima cosa: este artículo sobre la técnica de los Loci me costó trabajo y tiempo, espero que te haya sido útil. Si te gustó o conoces a alguien al cual le podría resultar útil la técnica de los Loci, compártelo en tu página facebook. Saludos. Armando.
Está padrisímo, realmente siento que es increíble la rapidez con la que podemos asociar las cosas, yo utilicé estás técnicas que menciona en su libro de Técnicas de memoria Veloz , bueno algunas, me quedé impresionada ! Agradezco y Admiro muchísimo su trabajo ! Es verdaderamente un aprendizaje de vida !